De bibliotecas y estudiantes

La relación entre bibliotecas públicas y estudiantes, sobre todo universitarios, salta a la palestra de los medios de comunicación periódicamente, principalmente cuando se demanda o informa de la ampliación de horarios, que viene a ser en septiembre, febrero o junio, fechas en las que suelen concentrarse los exámenes. Resulta curiosa, por no decir chocante, la atención que los políticos y los medios prestan al asunto, la aceptación incuestionable de que está bien, es como debe ser, que una biblioteca pública (BP, para ahorrar espacio) atienda esas demandas. Digo que resulta curioso, por no decir chocante, 1º, porque en una BP, no hay libros de texto ni manuales académicos, por lo que el uso que los estudiantes hacen de las instalaciones bibliotecarias se reduce a: mesa, silla, luz, climatización, servicios –sanitarios- y pasillos –para el móvil-; 2º, porque utilizar a los estudiantes como justificación para ampliar la oferta bibliotecaria es una estupidez política de tamaño descomunal, puesto que habría mil y una razones para hacerlo y todas más válidas, desde la ampliación de la oferta cultural al tiempo de ocio, hasta la de ofrecer refuerzo formativo a colectivos inmigrantes, por ejemplo, y 3º, porque el gasto que implica atender esa demanda podría invertirse en mejorar alguna de las muchas y escandalosas carencias que sufren las BP en nuestros municipios. No niego que los estudiantes deban tener un lugar donde estudiar fuera de casa (y las BP pueden ser ese lugar durante su horario de apertura: deben ofrecer sus servicios a todos los ciudadanos, sin distinción); lo que no puede ser es que se asocie esa necesidad a las BP. De todos los colectivos que acuden a ellas, el que menos utiliza los recursos bibliotecarios es el de los estudiantes que demandan ese espacio. Bastaría un aula en cualquier dependencia municipal. ¿Podría estudiarse el asunto, aunque fuese en una biblioteca pública?

Artículo publicado en las revistas Zigzag (www.zigzagdigital.com) y Noticias de tu ciudad (www.noticiasdetuciudad.com), en los números del mes de noviembre de 2008.
Es una versión abreviada de otro que, bajo el título de ESTUDIOTECAS VS BIBLIANTES, trata el tema más en profundidad y se puede leer en:

http://www.zigzagdigital.com/opini-n/estudiotecas-vs-bibliantes